Escrito por Guillermo Sebastián Mircovich.

PERÓN apoya la Ley de Medios

Como desde el gobierno pareciera que se tendría vergüenza de ser Peronistas, desde esta humilde web le daremos a la Señora Presidente de todas y todos los argentinos los argumentos del porque la Ley de Medios es rechazada por los grandes monopolios, exponiendo variados testimonios expresados por el General Perón el 21 de Agosto de 1947.

”...los intentos por desacreditarnos han fallado y la verdad es que en el exterior aquellos hombres que han tenido la loca pretensión de inmiscuirse en nuestros asuntos y de marcar el camino de la ciudadanía argentina han fracasado ruidosamente, porque nuestro pueblo ha rechazado altivamente el intento y sus propios pueblos les han vuelto la espalda con desdén.

La campaña de descrédito a que he aludido, se asienta en el falseamiento de los hechos políticos y de los hechos económicos. Hoy hablaré de los aspectos generales de la campaña y los métodos que se emplean para desarrollarla; métodos en verdad poderosos porque para aplicarlos se han coaligado la vieja política, la prensa netamente capitalista, un sector considerable del capitalismo que torpemente ve en los avances sociales un peligro para sus intereses, los enemigos que en el exterior mantienen ideales extremistas de izquierda y de derecha, y los enemigos que en el interior sirven tales doctrinas foráneas, incompatibles con nuestra tradición y con el sentido de nuestra Constitución."

Examinaremos en primer término la actitud de algunos periódicos que secundan manifestaciones impulsadas por políticos apasionados y desorbitados. Pretenden presentar la situación argentina como la de un estado enemigo de la libertad y de la democracia; imputación fácil de hacer y que se puede lanzar impunemente contra todos aquellos que no participan de las ideas del imputador.

Para conseguir el efecto buscado, el primer eslabón consiste en afirmar que en la argentina no existe libertad de prensa ni libertad de pensamiento. Pero tal afirmación está desprovista de fundamento. No hay censura para los libros, ni para los espectáculos, ni para la prensa. La simple lectura de los periódicos, lo acredita plenamente. Las agencias y los diarios que se denominan así mismo serios, adoptan aires de gran señor para lanzar la insidia, la mentira y los mas burdos sofismas.

La prensa menor, ciertos semanarios, no se preocupan del estilo y no emplean otra cosa que la provocación, la vulgaridad, el insulto, el desacato y la calumnia.

Sin embargo, quiero recordar que el gobierno se ha mantenido sereno frente a los ataques y ha dejado que todo el mundo diga lo que quiera, lo mismo si lo hacía en forma correcta que si mentía plenamente en el campo del delito."

Perón habla de la derecha y de la izquierda, por eso hay varios periodistas que han cambiado de mano en reiteradas ocasiones y se bambolean por diferentes grupos político económicos y culpan descaradamente a los periodistas que defienden al gobierno, pero ocultan vergonzosamente lo que ellos recaudan por ofrecer su cara a favor de intereses opuestos a los del pueblo, evidencias que el gobierno no sabe explicar explícitamente porque los lugares donde debe hacerlo como lo define la Doctrina Justicialista están perpetuamente cerrados a la militancia.