Skip to main content

La verdadera historia de Sarmiento nunca contada para Sarmiento. El General San Martín solo fue un viejo emocionado (Capítulo 3/10)

A esta altura del partido toda manifestación escrita por el gran Sarmiento no debe asustar a nadie, se lo hemos dado a conocer en los dos anteriores capítulos de esta historia y se debe entender con que “bueyes aramos”, no solamente por el gran educador sino por aquellos que vieron la oportunidad de enaltecerlo para sacar provecho de las pavadas ignominiosas que escribió en su vida, “paparruchadas”, diría un gaucho este liberal de enredadera.

El plan fue ejecutado a la medida de la política liberal, apuntalando consecuentemente a la demanda del colonialismo inglés “…el apoderarse de Buenos Aires fue ineludible para el poder militar y civil. De memoria lo sabían Mitre, Sarmiento, Avellaneda, Roca y todos los jefes, esta defección de las oligarquías de la Provincia de Buenos Aires resultó como el dicho del viejo Hobbes,…sobre la tierra argentina no hay poder que (me) sea comparable”.1

El pobre San Martín lo sufrió en su ostracismo donde lo mandaron los pares intelectos de los actuales liberales que comenzaron a asomar sus cabezas en 1826.

Molesto por las informaciones políticas que llegaban a Buenos Aires de los escritos y dichos de San Martín, el inefable educador manifiesta“…San Martín, el ariete desmontado ya que sirvió a la destrucción de los españoles; hombre de una pieza; anciano batido y ajado por las revoluciones americanas ve en Rosas el defensor de la independencia amenazada y su ánimo noble se exalta y ofusca…fastidiado estoy de los grandes hombres que he visto”. AÑO 1845. La Crónica. Esta era la visión de Sarmiento, no podía creer que el General San Martín elevara el nombre de Rosas a héroe por defender la navegación de los ríos interiores de nuestra patria haciendo frente a la armada inglesa y francesa.

Pero la preocupación de Sarmiento en este texto inaugural no es, todavía, poner en escena lo heroico de la independencia, sino algo mucho más fundamental y que, en el año en que escribe, considera que está en peligro. Al finalizar el artículo, Sarmiento se pregunta por el presente, su presente, veinticuatro años después de los sucesos ocurridos. ¿Cómo se recuerdan las batallas de la independencia? El problema que trabaja en este artículo es justamente el olvido, el olvido del origen pero el: ¡¡El hacedor de Chacabuco!!

La generación que siguió la independencia a la cual Sarmiento pertenece pero critica desde su alter ego “teniente de artillería”) es para él una “generación ingrata”, complaciente, despreocupada, carente de patriotismo, que no valora la ruptura emancipadora y solo cuestiona a sus figuras como si el régimen colonial en el que fuimos creados, y la ignorancia y la abyección de nuestros padres, nos hubiera dejado solo virtudes”¡Un día los que lidiamos juntos en Chacabuco y en otros lugares tan gloriosos como este; un día el extranjero, porque vosotros no sois capaces, vendrá a recoger los inmortales documentos de nuestras gloriosas hazañas”, y desechará con desprecio vuestro abultado catálogo de recriminaciones, solo dignas de figurar en la historia, como un aviso de que eran hombres los que tales cosas y tan grandes hicieron. Pero Sarmiento no peleaba por nadie, porque sus conceptos no eran americanos "El Progreso",27/09/1844,"ElNacional",19/05/1887,25/11/1876y08/02/1879.INF SOBRE SANMARTIN, SARMIENTO, BELGRANO, era tan mentiroso que no sabía como comenzar a contar una de las grandes batallas del General San Martín y se arrogó un puesto, pero como líder de un lugar donde cientos de compatriotas compartieron un gran triunfo ¿Qué puede decir un hombre sobre la independencia si su pensamiento era "…¿Lograremos exterminar los indios?. Por los salvajes de América siento una invencible repugnancia sin poderlo remediar. Esa calaña no son más que unos indios asquerosos a quienes mandaría colgar ahora si reapareciesen. Lautaro y Caupolicán son unos indios piojosos, porque así son todos. Incapaces de progreso. Su exterminio es providencial y útil, sublime y grande. Se los debe exterminar sin ni siquiera perdonar al pequeño, que tiene ya el odio instintivo al hombre civilizado". Este es el verdadero Sarmiento, aquel que odia con todo sectarismo, lo argentino, lo gaucho, a los héroes de la independencia y así dice de San Martín “…vale por lo que toda la historia de Mitre dice sobre el tema”. OBRAS COMPLETAS DE SARMIENTO. Tomo 49. Pág. 102, “…a él le debe San Martín su vindicación que trajo por resultados su restablecimiento en sus grados y honores. OBRAS COMPLETAS DE SARMIENTO. Tomo 49. Pág. 105. Quiere decir que si no es por Mitre al General San Martín no lo conocía nadie y lo denuesta continuamente “…sobreviven en estas confidencias íntimas de viejos capitanes, cuya vida es, por decirlo así, de recuerdos”. OBRAS COMPLETAS DE SARMIENTO. Tomo 49. Pág. 105. “…veía fantasmas de extranjeros y todas sus ideas se confundían… i Rosas, la independencia i la restauración de la colonia” OBRAS COMPLETAS DE SARMIENTO. Tomo 50. Pág. 108, confundía con sus teorías y tiene el tupé de comentar todo lo contrario de lo que decía en Chile orgulloso de la Batalla de Chacabuco y de San Martín, pero así lo trata, con total desfachatez a un hombre que por la patria se alejó de su familia y nunca presentó una factura con un gasto de “orgias” como lo hizo Sarmiento en Europa ¡¡Cuanta decencia!!

Para sanear un poco al gran educador y ayudarlo en su tarea según la historia de Mitre, de no faltar nunca a clase e inaugurar tantas escuelas, digamos que mucho antes San Martín fundó: En Mendoza la Escuela de Enseñanza Media y ni hablar de su discurso. LEER SARMIENTO, LOS LIBERALES Y EL IMPERIALISMO INGLÉS. Roberto Tamagno.

En Chile 1817 con 10.000 pesos que le habían obsequiado creó una biblioteca pública.

Después de Chacabuco mejoró la Escuela del Monasterio de la Buena Enseñanza (muy buena paradoja”, dos Escuelas con 300 educandos cada una, seis Escuelas con no menos de ochenta alumnos cada una.

En Mendoza también en 1817 se terminó el Colegio promovido por San Martín, una manzana con tres grandes patios, los títulos otorgados eran aceptados por las Universidades argentinas.

En 1821 crea la primera Escuela normal y una biblioteca en Perú.

Estableció una escuela en el mismo Convento donde profesaba con más de 20educandos.

¡¡Vamos primer educador!! las mentiras tienen patas cortas y eso que San Martín era un soldado, pero seguramente entendía lo que debía enseñarse en las escuelas.

El Sarmiento de la espada, la pluma y la palabra es un “curro” mas del liberalismo, el mensaje de la chusma andrajosa y harapienta no es mas que una táctica manejada por los ilustres amigos del sanjuanino y sus marranadas.

Debemos introducirnos en el Archivo General de la Nación para desenmascarar a este mentiroso confabulado con Mitre para falsificar la historia.

Honor y gratitud a San Martín por Argentina, Chile, Perú, las bibliotecas y las escuelas. Síganme en el Capitulo 4, no los voy a defraudar, pero en serio. SEAMOS ARTIFICES DE NUESTRO PROPIO DESTINO, NUNCA INSTRUMENTO DE LA AMBICION DE NADIE. Juan Domingo Perón.

 

 


 

1-FEDERALISMO Y DESCENTRALIZACION EN LA CULTURA ARGENTINA. Juan Lazarte. Ed. L de la Torre.

 

  • Visto: 5410