Skip to main content

Carta a Mario Perón (24-03-1921)

Campo Mayo, 24 de marzo 1921

Señor Mario T. Perón

Sierra Cuadrada

Mis queridos padres:

En mi poder su última de fecha 1° del corriente, portadora de la grata de que están bien, me apresuro a contestar (...)

Volviendo a nuestra común manera de pensar con respecto al desgraciado del peludo, que desgraciadamente para el país le llaman presidente cuando debía ser un anónimo chusma, como realmente lo es te contaré su última hazaña, propia de un cerebro desequilibrado, de un corazón marchito por que en él no se hace presente un solo átomo de vergüenza ni de dignidad, porque solo un anarquista falso y antipatriota puede atentar, como atenta hoy este canalla contra las instituciones más sagradas del país, como es el Ejército, [ilegible] con la política baja y rastrera, minando infamemente un organismo puro y virilmente cimentado que ayer fuera la admiración de Sud América cuando contaba con un presidente que era su jefe supremo y que tenía la talla moral de un Mitre o un Sarmiento, cuando la disciplina era más fuerte y más dura que el hierro, porque desde su generalísimo hasta el último soldado eran verdaderos argentinos amantes de su honor, de la justicia y el deber y que llevaban el sagrado lema de los hombres bien nacidos "Seamos fuertes y unidos para servir a la Patria".

Todo ese legado honroso y sagrado lo ha destruído este canalla, con su gesto y su acción más digno de un ruso anarquista, que de un criollo.

Gracias a Dios termina. Para que te formes una idea de cuan grande es el mal que este hombre ha hecho al Ejército te mando ese librito, que se publicó y mandó a todos los oficiales del Ejército; cosa que podrá mostrarte todo el daño que este infame causó en desmedro de la disciplina en nuestro tan querido Ejército que siempre fue modelo de abnegación y de trabajo honrado pero que hoy la presión es tan grande que se siente impotente para resistir y explota; clamando que se cumplan las leyes y orando a Dios que termine este gobierno de latrocinio y de vergüenza. (...)

  • Visto: 3561